Esta vez lo intenté con PH y AC, sin el éxito esperado, pues un accidente nos cortó las alas cuando aun restaban 50 km
A los cinco minutos de tomar el anterior pictograma, AC me alcanzó por la retaguardia y fuimos ambos al suelo. Yo salí indemne, pero AC se dolía de una rodilla y una muñeca, y la cosa se fue inflamando rápidamente, por lo que decidimos volver por la vía rápida antes de que la cosa fuera a mayores. Una verdadera pena, pues empezábamos a saborear los paisajes serranos en todo su esplendor y verdor en un soleado día tan agradable que diríase primaveral.
Pero lo primero es lo primero, por lo que volvimos a casa por carretera por el camino más directo. Estamos emplazados para terminarla de una maldita vez más adelante.
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