miércoles, 10 de junio de 2015

El marciano

Ese es el título, literalmente traducido, de la primera obra literaria de Andy Weir, originalmente "The martian".
En cambio, algún iluminado, como de costumbre, se ha inventado otro que poco tiene que ver, "Marte: Operación Rescate", para bautizar la versión doblada al español de la película basada en tal libro, dirigida a la sazón por el mismísimo Ridley Scott:




El libro lo leí hace unas semanas. Después de meses dedicado a la novela histórica y la filosofía, he vuelto a esa otra gran pasión que ha llenado tantas y tantas horas de mi vida preadolescente, es decir, desde los 12 ó 13 años hasta hoy día.
Es un placer reencontrarme con la ciencia ficción, tema que siempre me ha entusiasmado, y me vanaglorio de poder decir que he leído, con casi total seguridad, todos los grandes clásicos de este género literario... y muchos otros que no lo son. Y he encontrado satisfacción y gozo, mucho.
Desgraciadamente, es un nicho que requiere hoy día de grandes dosis de imaginación, y tal y como se ha puesto la cosa, abundantes conocimientos científicos, como ocurre con los últimos grandes éxitos (Interstellar, o la misma El marciano, quod erat demostrandum), y es algo difícil de conjugar en un entramado que sea atractivo y novedoso.
"El marciano" no es novedoso en el fondo del asunto, pues alguos verán en él una revisión del clásico de Daniel Defoe (siglo XVIII) Robinson Crusoe. No les falta razón. Pero el quid no está en el fondo, mil veces imitado con mayor o menor gloria (quizá la vesión más famosa sea Náufrago, con Tom Hanks), sino en la forma.
La acción se traslada al espacio, a 225 millones de kilómetros de la Tierra, en el planeta Marte, donde un astronauta ha sido abandonado creyéndolo muerto. Allí este señor, con grandes dosis de humor, buena actitud positiva (¿cómo si no?), y haciendo uso de sus amplios conocimientos como ingeniero y botánico, deberá sobrevivir hasta ser rescatado. Seguir con vida en un entorno tan hostil para el ser humano, amén de la soledad, la falta de comunicación, los innumerables problemas, se convierte en una aventura.
El libro es la primera obra del autor, lo que tiene mucho mérito, y se ha convertido rápidamente en un best seller a nivel internacional. Todos los frikis de la sci-fi lo tenemos, por supuesto. Y hay que decir que está bien. Tiene una forma original de contar la historia, mezclando un diario que el señor marciano va escribiendo prácticamente día a día, con la situación en la Tierra cuando se percatan de que vive y hay que elabarorar planes para traerlo de vuelta sano y salvo. Mantiene la tensión y el interés, pero el final, la verdad, me ha recordado a esas películas que no saben como acabarlas y cuando ves el desenlace te quedas un poco, no sé, como un poco chof.

De todos modos, léanlo. O en su defecto, si son vagos, arriésguense a que la película lo mejore...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comente, quédese a gusto, pero si firma como anónimo nadie lo verá.