Una mañana de sábado que se preveía calurosa, yo salí temprano para estar de vuelta antes de que arreciara la calor. Pero esos planes que uno hace, a menudo se tornan cuando los elementos cambian: coincidir con amigos en la gasolinera, y que se unan más amigos en la venta donde desayunamos, convirtió el paseo en algo más largo de lo previsto, pero dio igual porque lo pasamos muy bien.
Estampa a las puertas de la Venta Domínguez, multicolor, Italia contra Japón:
Curvas y más curvas, flow, asfalto roto en la N-435. Sube, baja y bebe, en Pablo Rada, Ziaro, botellas de tercio Cruz del Campo que entraron como el agua. Risas, anécdotas, planes.
Para repetir muchas, muchas veces. Hasta la saciedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente, quédese a gusto, pero si firma como anónimo nadie lo verá.