miércoles, 24 de febrero de 2010
Cinco
La libertad se puede definir como la capacidad, o mejor dicho, la posibilidad de poder elegir. El que no puede elegir no es libre, así de sencillo. Si ante una decisión a tomar, puedes elegir entre varias soluciones, cuanto más variadas sean, cuanto más amplio el abanico de respuestas, más libre serás.
Seré entonces libre de elegir CINCO, y sólo cinco coches. Los que yo quiera, sin límite de presupuesto, para tenerlos en un garaje utópico, virtual. Los cinco que compraría ahora, hoy mismo, por una u otra razón que intentaré exponer.
- Lambo Gallardo Balboni para disfrutar en carretera.
Pocas unidades en el mercado del LP 550-2 Valentino Balboni, pero supongo que abonando rápidamente el módico precio de 212.000 €, no será problema tenerlo en tu plaza de aparcamiento particular un viernes a la salida del trabajo, para encarar la vuelta a casa dando el preceptivo rodeo de 180 km llenos de subidas y bajadas de puertos de montaña, curvas, rasantes y un poco de highway. El motor tiene 550 CV y va acoplado a la caja de cambios automática «e-gear», lo que le permite alcanzar 320 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 3,9 s.
El único Lambo de propulsión trasera de los últimos años es un coche muy especial, con aerodinámica tarados de suspensión específicos, dedicado expresamente a don Valentino Balboni, probador y encargado de puesta a punto de la marca durante 40 años, recientemente jubilado.
Caso de ser muy difícil o imposible su adquisición, me conformaría con un Murciélago LP650-4 Roadster.
- Mini Cooper JCW cabrio para ciudad.
No es el típico Mini, ni siquiera el Mini Cooper S es asimilable en cuanto a exclusividad y diversión. Te esperará en el garaje del centro comercial, a la salida del cine, sólo si has desembolsado 34.830 € por la versión básica... que por supuesto no sería la que yo comprara, ya que añadiría faros de xenón, el retrovisor interior electrocrómico, los asientos delanteros con calefacción y tapicería de cuero, los limpiaparabrisas automáticos, los espejos exteriores plegables eléctricamente, la pintura metalizada, cambio automático, llantas más bonitas...
Con este juguete se puede circular por ciudad sin llamar mucho la atención -según la ciudad de que se trate, claro, porque en algunas no la llamará nada-, con los niños detrás, y disfrutar del aire libre si las circunstancias son propicias, todo ello con el glamour, acabados de calidad, y estética chic propios de Mini.
- Porsche Cayenne Turbo para casi todo.
Por sólo 125.000 € más extras, por supuesto, que elevarán el precio total en más de 20.000 € con toda seguridad. El Cayenne tiene unas cualidades dinámicas sobresalientes entre los todo terreno de tipo SUV, especialmente en carretera.Fuera de ella se desenvuelve muy bien, aunque no tenga la misma capacidad que algún todo terreno pensado específicamente para ese uso, como un Mercedes-Benz Clase G. Pero con un G no podrás alcanzar 275 km/h, acelerar hasta 100 por hora en 5'1 segundos, ni pasar por el primer kilómetro en sólo 24'2 segundos. Tampoco podrás viajar con la familia y cargado de equipaje con la misma seguridad y comodidad, y sí podrás adentrarte en el campo con cierto brío, dejando detrás a muchos supuesto rivales, salvo en trialeras reservadas exclusivamente a vehículos especializados. O sea, que me sirve.
Por supuesto, como todo el mundo sabe, puedes ir a la compra con él gracias a su espacioso maletero, y llevar a los niños al cole.
La segunda opción sería sin pensarlo un Range Rover hasta las trancas, que tiene capacidades más todoterreneras... pero es mucho peor en carretera. Es también muy bonito, y no tiene el aura de "coche de constructor-nuevo rico" del Porsche, pero creo que en calidad general es peor.
- Aston Martin V12 Vantage para viajar solo o en pareja.
Sí, para viajar es mejor que el más ruidoso, rudo y deportivo Lambo de arriba. El Aston Martin Vantage V12 es un deportivo biplaza de tracción posterior y motor V12 de 517 CV. Sólo está disponible con una caja de cambios manual de seis velocidades, pero podré vivir con ello ya que no voy a utilizarlo apenas por ciudad. Unicamente se fabricarán 1.000 unidades del Vantage V12, que en España tiene un precio de 196.529 €. La alternativa plausible sería un Maserati Gran Turismo, sin ninguna duda, una belleza acojonante, aunque un poco menos exclusivo y 80 cv menos potente.
- Porsche GT3RS para tandas.
No me vale cualquier 911, tiene que ser ese, o en su defecto un GT3. Lo podría tener a partir de mediados del 2010 por sólo 161.440 €. Tiene un motor bóxer atmosférico de 3,8 l de cilindrada con 450 CV, que sube mucho de revoluciones -guay-, y un equipamiento de primer nivel en suspensiones -regulables- y frenos. Este lo dejo sólo para el circuito, por supuesto, y se lo prestaría a mis amigos de vez en cuando.
Alternativas: F430 Scudería, Audi R8 V10, Porsche Carrera GT.
Esta lista no tiene ningún orden de preferencia. Son cinco coches. Punto. Y reconozco que para muchos puede considerarse que se trata de elecciones vulgares... por la ausencia de grandes mitos o autos magníficos y únicos como el Enzo, el Reventón, el SLR McLaren; o clásicos de bandera como Lambo Mihura, Ferrari 250, MB 300 SL GW, por poner algunos ejemplos. La verdad es que no me sirven los magníficos y únicos, bien porque no se ajustan a lo que quiero, bien porque para mí no son tan magníficos. En cuanto a los clásicos, bueno, no soy aficionado a esos autos, no se pueden usar con garantías como cualquiera de los cinco elegidos por mí, ni cumplir su cometido con garantías suficientes. No quiero ser un coleccionista con una nave repleta de viejos coches que nunca usaré. Prefiero tener sólo cinco, pero con posibilidades de ser conducidos en cualquier momento.
Al final, el montante final necesario para adquirir esos vehículos nuevos, de concesionario, no es tan exagerado como muchos pudieran pensar, unos 730.000 euros, cifra disponible por mucha más gente de la que pensamos.
Y hacerse con ellos sería tarea fácil y rápida, lo podría conseguir en un día. Lo que no quita que, en breve lapso de tiempo, cambie mi listado actualizándolo por diversas causas.
martes, 23 de febrero de 2010
Wuuuaaalaaaa !!!!
Sí, les parecerá basto, chabacano, y totalmente impropio de este blog el uso de una expresión como la que titula a la entrada de hoy. Pero era necesaria.
Como pasa con casi todas las cosas que hace el hombre, hay cosas y cosas. Me explico. Hay casas y casas, hay bolígrafos y bolígrafos, hay motos y motos, relojes y relojes, y, por supuesto, hay coches y COCHES, con mayúsculas.
Algo me dice que no hay que profundizar mucho en el concepto, que lo vemos todos los días en casi todos los ámbitos de nuestra, a menudo, apacible y monótona vida. Pero a mí me gusta soñar, y por tanto les voy a hablar un poco de un automóvil que es a los coches lo que ciudades como París, Londres o Roma son al concepto de ciudad en sí mismo.
Les presento a Sir Phantom Coupé, qué digo, Archiduque Rolls Phantom Coupé:
· Mide cinco metros y sesenta y un centímetros de longitud, que se dice pronto. Un Mercedes CL mide cinco metros y seis centímetros, lo que hace casi medio metro más corto... y ya es un coche que visualmente es grande. El clase S en versión larga llega a los cinco con veintidós, y parece enano frente a la mole del RR, que es incluso once centímetros más ancho y doce centímetros más alto... lo que viene a ser un auténtico tanque. Me lo imagino con una torre ametralladora sobresaliendo cual periscopio, y un par de lanzallamas a lo James Bond, en serio.
· El coche deja mucho espacio para los pasajeros, aunque se trate de un peculiar "coupé". Digo lo de peculiar porque aunque en RR lo denominen como Coupé, supongo que se refieren al simple hecho que implica tener sólo dos puertas. Pero la palabra "coupé", que viene del francés y cuyo significado es "cortado", se refiere originalmente a un tipo de coche que es eso, corto, o cortado, respecto del tamaño "normal" de un sedan al uso. Al ser más corto, buscando un comportamiento más deportivo -menor distancia entre ejes, menos peso, diseño más dinámico- sólo pueden quedar bien integradas dos puertas. Lo de tener dos o cuatro plazas no es algo consustancial al concepto de coupé en sí, sino más bien una obligación derivada de su propio diseño corto. Por ello, la mayoría de los coupés son de dos plazas, o tienen una configuración típica de 2+2 -que significa dos plazas delante y otras dos minúsculas plazitas detrás, propias de niños, para llevar equipaje, o para una corta y urgente emergencia si se trada de uno o dos adultos de talla minúscula -Dani Pedrosa, un jockey, el campeón de Albacete de peso paja-.
En el caso del Phantom Coupé, que parece ser deriva del Phantom a secas, se ha recortado en 23 centímetros la longitud. Si el Coupé ya es inmenso, traten de imaginar el carguero con ruedas que es el Phantom original, con 5'84 metros, un metro más que un clase E o un serie 5.
Los que viajen detrás no irán tan cómodos como en un Ghost, pero sí mucho más que en prácticamente cualquier otro coche del mercado. Esto tiene una contrapartida, que es el ridículo espacio dedicado al equipaje. Si abrimos el maletero, acto que se puede realizar dando movimiento únicamente al portón típico, o accionando también la parte trasera, que se conoce como de tipo "picnic", nos encontramos con un volumen de unos 395 litros. Si se abren las dos partes, uno o dos adultos pueden sentarse en la puerta inferior -soporta un peso de hasta 150 kg-. Como parece que el potencial cliente de este auto no controla muy bien lo de los litros de volumen -¿cosas del sistema imperial?, se especifica claramente que caben cuatro juegos completos de palos de golf... cosa que, permítanme la osadía, dudo que sea verdad, a menos que sean juegos de palos de golf de niño pequeño.
Este volumen es ridículo al lado de los 300 de mi SLK, los casi 500 del Altea XL de mi señora esposa, o los 560 del antesdicho clase S. No obstante, este es un mal menor, porque quien use eso para viajar, puede costearse fácilmente que tus siervos vayan por delante con todas las maletas de Vuitton necesarias, y avisen de la localización de los esclavos del Estado dispuestos a arruinar la fiesta de excesos con el pedal del acelerador. Asimismo, pueden ir haciendo la lista de gasolineras susceptibles de rellenar el tanque de cien litros que tiene la molesta manía de vaciarse a un ritmo tan cruelmente rápido como placentera es su conducción.
· No es precisamente liviano, pues sus 2.665 kg en orden de marcha son similares a los de un Hummer H2, aunque no están igual de mal repartidos, obviamente. Su motor está configurado como un V12 de 6.749 centímetros cúbicos, lo que otorga una finura superlativa, un par motor más que suficiente para mover al extinto Titanic, y lanzarlo a una elevadísima velocidad de crucero gobernada electrónicamente. Mucho ojo, que no se dice "limitada", sino "gobernada", que es un detalle muy apreciable, muy inglés, y que me ha gustado muy muchísimo. Dicho motoraco es fabricado por BMW, aunque la marca bávara no lo monta en ninguno de sus modelos. El motor más grande de BMW, un seis litros, es el que tiene el 760i. Por descontado, es automático.
· Pocos coches se permiten la osadía de montar unas llantas de 21 pulgadas, y además conseguir que parezcan pequeñas, y que su conducción no sea para nada incómoda.
Esta iluminación es ajustable, y se complementa con dos luces de lectura direccionables en los asientos posteriores.
Su primo hermano, el Phantom Drophead Coupé: mismo perro, pero destechable. Simplemente espectacular.
domingo, 21 de febrero de 2010
Campeones del Mundo
Carl Fogarty: cuatro veces Campeón del Mundo de WSBK, en 1994, 1995, 1998 y 1999. Ducati.
Colin Edwards: Campeón del Mundo de WSBK en 2000 y en 2002. Honda.
sábado, 20 de febrero de 2010
Murphy
viernes, 19 de febrero de 2010
jueves, 18 de febrero de 2010
Pepinos
O esta fantástica Yamaha R6 del Campeonato del Mundo de Supersport:
Y para acabar, el coco, la bestia negra, LA MAQUINA:
miércoles, 17 de febrero de 2010
Carlos Marx necesitó ocho años para acabar los tres tomos de El capital y anunciar el fin del capitalismo. Tardó más en acertar que en escribir y tantos años después, a pesar de que dicen que vivimos en la sociedad del conocimiento, no ha surgido nada nuevo. Los economistas nos dicen cada tarde en la radio que esto se hunde, pero nadie tiene la imaginación para buscar salida al capitalismo al que tanto queríamos.
Por lo menos lo amaba Michael Moore, ese gordo que viaja en limusina y que en su última película (Una historia de amor) nos informa de que el sueño americano era sólo una pesadilla y el capitalismo, que tanto amaba, únicamente una patraña de financieros hampones. Aquel modelo que consistía en que un limpiabotas podía llegar a ser millonario se ha invertido; ahora los millonarios están a punto de ser limpiabotas, mientras las millonarias compran los vestidos de raso por 80 euros.
El capitalismo, aquel sistema que convirtió el mundo en unos grandes almacenes con señales luminosas tapando las estrellas, el que hizo posible que Ronaldo dando patadas a una pelota ganara más que 100 premios Nobel, está en liquidación, como ya descubrió Camba en el 29: se les fue la mano a los de Wall Street, ganaban y compraban más acciones, y las acciones volvían a subir, y las gentes volvían a ganar, y el globo se iba dilatando, y cuanto más se dilataba el globo, ascendía aún mucho más alto, y nadie pensaba en el reventón.
El capitalismo, a sus 360 años, según Michael Moore, no vive una crisis cíclica, sino un pasmo agónico. Hasta el fetichismo del striptease de brazos de Rita Hayworth está en las rebajas. Todo se hunde, todo lo regalan.
Raúl del Pozo, 16/02/2010, El Mundo
martes, 16 de febrero de 2010
bushido
· Ejemplo #1: No voy muy rápido, sólo más ligero que la media, a unos 160/170, como quien dice a punta de gas. Un cochecillo al que acabo de adelantar, tras dejar una nube de humo negra -es lo que tiene acelerar a fondo con un motor que consume de eso que usan las calderas- se coloca detrás de mí, a una distancia poco prudente que en caso de que yo tuviera que hacer una frenada de emergencia provocaría una colisión irremediable de consecuencias desastrosas. El auto en cuestión es uno de esos VAG tdi, con su mononeuronal y orgulloso "piloto" deseoso de merendarse a cualquier cosa que ose ir más rápido que él en la aburrida recta de cinco kilómetros por la que circulamos, demostrando así su hombría -al final va a ser verdad aquel tópico de que el coche no es sino la prolongación del pene-. No me puedo apartar, que es mi deseo inmediato, porque voy rebasando una larga fila de vehículos que circulan muy modositos a velocidades entre 100 y 120 por hora, pero el descerebrado ¿conductor? del tdi va tan pegado a mi culo que me hace ráfagas y no llegan a mis retrovisores. También decide encender el intermitente izquierdo, como si fuera a girar repentinamente y perderse entre las adelfas que adornan la mediana. A veces, en ocasiones como ésta, toco levemente el freno con el pie izquierdo sin dejar de pisar el acelerador, sólo para que se enciendan las luces y el tipo se asuste un poco y se separe. Lo hago un par de veces con el efecto deseado, pero como es fácil de predecir, sólo sirve que para que se pegue aún más. Llego al final de la fila de vehículos lentos, pongo mi intermitente y me aparto al carril derecho con mi velocidad mantenida gracias al tempomat, e inmediatamente soy superado por ese jovenzuelo que me echa, de paso, una increible mirada de odio mientras lleva los nudillos blancos de lo fuerte que agarra el volante... Lo dejo ir, pero lamentablemente, pasados unos kilómetros lo vuelvo a rebasar. No he tocado el tempomat, voy a la misma velocidad. Obviamente, ese crío quería un pique o algo así, algo carente de toda gracia o realismo por su parte, todo hay que decirlo. Pienso, una vez más, cuanto talento desaprovechado hay en nuestras carreteras, cuantos grandes pilotos se están perdiendo el DTM, el WTCC, el WRCC y la F1.
Estaba influenciado por el Zen y el Confucionismo, dos diferentes escuelas de pensamiento de esos periodos. El Bushido pone el énfasis en "Lealtad, auto-sacrificio, justicia, sentido de la vergüenza, modales refinados, pureza, modestia, frugalidad, espíritu marcial, honor y afecto"
El Código de Bushido.
Estos son los siete principios que rigen el código de Bushido, la guía moral de la mayoría de samurai de Rokugan. Sed fieles a él y vuestro honor crecerá. Rompedlo, y vuestro nombre será denostado por las generaciones venideras.
1.- Honradez y Justicia
Sé honrado en tus tratos con todo el mundo. Cree en la Justicia, pero no en la que emana de los demás, sino en la tuya propia.
Para un auténtico samurai no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honradez y justicia.
Sólo existe lo correcto y lo incorrecto.
2.- Valor Heroico
Álzate sobre las masas de gente que temen actuar. Ocultarse como una tortuga en su caparazón no es vivir.
Un samurai debe tener valor heroico. Es absolutamente arriesgado. Es peligroso. Es vivir la vida de forma plena, completa, maravillosa. El coraje heroico no es ciego. Es inteligente y fuerte.
Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución.
3.- CompasiónMediante el entrenamiento intenso el samurai se convierte en rápido y fuerte. No es como el resto de los hombres. Desarrolla un poder que debe ser usado en bien de todos.
Tiene compasión. Ayuda a sus compañeros en cualquier oportunidad. Si la oportunidad no surge, se sale de su camino para encontrarla.
4.- CortesíaLos samurai no tienen motivos para ser crueles. No necesitan demostrar su fuerza. Un samurai es cortés incluso con sus enemigos. Sin esta muestra directa de respeto no somos mejores que los animales.
Un samurai recibe respeto no solo por su fiereza en la batalla, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior del samurai se vuelve evidente en tiempos de apuros.
5.- HonorEl Auténtico samurai solo tiene un juez de su propio honor, y es él mismo. Las decisiones que tomas y cómo las llevas a cabo son un reflejo de quien eres en realidad.
No puedes ocultarte de ti mismo.
6.- Sinceridad AbsolutaCuando un samurai dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho. Nada en esta tierra lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará.
No ha de "dar su palabra." No ha de "prometer." El simple hecho de hablar ha puesto en movimiento el acto de hacer.
Hablar y Hacer son la misma acción.
7.- Deber y LealtadPara el samurai, haber hecho o dicho "algo", significa que ese "algo" le pertenece. Es responsable de ello y de todas las consecuencias que le sigan.
Un samurai es intensamente leal a aquellos bajo su cuidado. Para aquellos de los que es responsable, permanece fieramente fiel.
Las palabras de un hombre son como sus huellas; puedes seguirlas donde quiera que él vaya.
Antonio Gala, El Mundo, 16/02/2010
lunes, 15 de febrero de 2010
Zagato
El Aston Martin DB7 Vantage Zagato es un gran turismo de edición limitada realizado por Aston Martín y Zagato. Introducido en el Salón del Automóvil de París en octubre de 2002, el Zagato fue vendido de inmediato. Sólo 99 ejemplares se vendieron al público, aunque una unidad extra fue producida para el Museo de Aston Martin.
Al igual que el DB7 en que se basa, el DB7 Zagato es propulsado por un motor V12 de 6 litros y controlado a través de una transmisión manual de 6 velocidades, su motor produce 440 CV de potencia. El DB7 Vantage Zagato puede alcanzar una velocidad máxima de 300 km/h y puede acelerar de 0 a 100 km/h en un tiempo de 4,9 segundos, las estadísticas no son totalmente disímiles al Aston Martin DB9 del día de hoy.
A diferencia del posterior modelo, el Aston Martin DB AR1, el DB7 Zagato está construido sobre un chasis con una distancia entre ejes 60 mm más corta que el DB7 original, con un morro 24 mm más chato, y la trasera ha sufrido igualmente un chop de nada menos que 127 mm, otorgándole un tamaño más compacto y provocando un aspecto mucho más deportivo por tanto.
El chasis modificado de DB7 Vantage era construido en GB, y luego enviado a Milan para que Zagato acoplara a mano los paneles de aluminio de la carrocería. Debido a la reducción de su longitud, los asientos traseros fueron borrados, y el maletero era también más pequeño (¿y a quién le importa?)
La exagerada parrilla delantera, o la ausencia de parachoques, son detalles zagatiles observados en otros diseños también, y nos retrotraen a su antecesor, el DB4 Zagato, del que quizá les hable algún día.
viernes, 12 de febrero de 2010
Lo que es útil o inútil.
Algunos dicen que todo medio que no tienda a un fin es algo inútil per se.
Igualmente, si el medio tiende a un fin, puede ser o no útil, dependiendo de algunos factores como que se obtenga tal fin, o la relación entre esfuerzo y logro.
Luego hay fines en sí mismos. O mejor dicho, situaciones en las que el medio y el fin se mezclan, se confunden, se convierten en la misma entidad, en el mismo objeto.
Una gran parte de nuestra felicidad o el éxito en nuestras vidas, es conseguir eliminar en lo mayor posible los medios, o si esto no es posible -que no lo es-, convertirlos en fines directamente. Por ejemplo, y por no aburrir más con explicaciones metafísicas rayanas en la subcultura de la autoayuda: hacer un viaje largo para llegar a tu destino de vacaciones, sin duda se volverá mucho más gratificante y deseable si se hace con un descapotable, en un soleado y perfecto día primaveral, por carreteras de bellos paisajes dignos de postal, acompañado de esa persona que tanto deseas. Indudablemente, no es lo mismo que ir en un 600 con parienta, suegra, cuatro hijos, la baca llena, en pleno més de Julio y sin AA ni radiocasette. Indudablemente.
También se puede aplicar al trabajo. Pero eso lo dejaré para que ustedes elucubren un poco, que no se lo voy a dar todo hecho, hombre ya.
la Rocker
No perderé ahora el tiempo aquí explicando qué sea customizar, o qué coño es una chopper, una cerda ni, por favor, una Harley Davidson.
Como decía, tuvo lugar el anuncio de una de las motos más controvertidas de la Motor Company, una moto que llevó el concepto de moto chopper dirigida al ¿gran público? hasta su extremo.
Quiere esto decir que estamos ante una bicha de mordedura mortal: 96 pulgadas cúbicas, equivalentes a 1.584 cc; una horquilla larga y tumbada hasta los 36'5º, convenientemente ensachada al más puro estilo wideglide; la reconocida transmisión por correa con sexta marcha overdrive...
Estas nuevas motocicletas reproducen fielmente las líneas de una impactante “hardtail” original, a la vez que ofrecen cómoda conducción gracias a una suspensión trasera moderna oculta. El término hardtail se refiere a un estilo limpio en diseño de chasis sin suspensión trasera característico de una era pasada, aunque en EEUU y norte de Europa se siguen fabricando motos sin suspensión trasera, verdadera y sacrificada concesión a la estética.
Pero, al fin y al cabo, lo del chasis softail es algo propio de toda una gama, sí, lo adivinaron, la gama softail de Harley, que engloba varios modelos tan variopintos como posiblemente desfasados y absurdos. Lo que realmente caracteriza a la Rocker, que la hace amada por unos pocos y odiada por muchos talibanistas acérrimos de la casa madre del chopper mundial, es lo que significa, lo que demuestra, lo que amenaza.
Ahora viene un pequeño receso, una pausa en la línea argumental, aunque la historieta viene un poco a cuento en verdad:
Sigo.
Pues sí, uno ve estas motos, que se pueden comprar tal cual, y cuando gira la cabeza y posa sus ojos en una Harley, cualquier Harley, no puede sino quedar desencantado y preguntarse "Pero... ¿qué coño es lo que nos quiere vender Harley?"
Pero hay muchos más que se dedican a este negocio, y si no vienen más por Europa es simplemente porque aquí se construyen casas resistentes hechas sobre profundos cimientos de hormigón, y elevadas a base de ladrillo, cemento, vigas, bovedillas y rematadas con buenos tejados dignos de ese nombre. Son tan buenas nuestras casas que nos tenemos que entrampar media vida -o más- para pagarlas, de modo que nos queda poco dinero para gastar en un utilitario que te lleve al trabajo, y pagar un par de caprichos en forma de viaje familiar en verano... ¿Quién se va a gastar cuarenta, cincuenta o sesenta mil euros en una motito de éstas para dar un paseo de vez en cuando?
Mientras se lo piensan, pueden echar un vistazo a lo que nos estamos perdiendo por aquí:
- Big Dog Motorcycles
- American Iron Horse
- Big Bear Choppers/
- Iron Works Motorcycle
- Orange County Choppers
jueves, 11 de febrero de 2010
Golf
Mismo perro, distinto collar... pero mola, eh!
martes, 9 de febrero de 2010
Moda...
Yo flipando le digo, si no llevo asiento atrás -pensando que prefería ir en moto y no en taxi-.
Pero va y me contesta: " no, es que se lleva ".
¿Me pongo también el casco y los guantes? Dije yo.
Imbécil, dijo ella.
Nunca lo entenderé.
lo clásico
No queriendo entrar en lo acertado o adecuado de la adaptación de estos recientes diseños, la verdad es que nos recuerdan, sí o sí, sin ningún género de duda, a aquellos a los que autoplagian. O sea, sus líneas son un calco de los modelos de antaño, con las necesarias reformas para actualizar sus prestaciones, y las mínimas reformas para adecuarse a los nuevos tiempos y sus demandas -más espacio interior, por ejemplo, en el caso de los autos, o acabados dignos del precio que marcan sus fabricantes-.
No obstante, aunque los casos mencionados son populares, conocidos por casi todos, no dejan de ser vulgares copias modernas de máquinas que, aunque bonitas y reconocidas por una u otra causa, fueron "vulgares", en el sentido estricto del vocablo. Quiero decir que eran coches del vulgo, de la gente -como dirían los Compadres-. Eso resta glamour, y mucho.
Ultimamente hay cierta fiebre del vehículo clásico en nuestro país, aunque no tanto como en Reino Unido o EEUU, pero, la verdad, los clásicos típicos de aquí dan un poco de pena, incluso un poco de asco. Lo de la repugnancia es debido, en gran parte, a la tan acérrima como irracional defensa frente a terceros del valor intrínseco que puede tener un cochecillo como un Seat 600, un 850 o un R-4. NO, oiga, NO. Para usted, tonto de los cojones, le recordará una grata niñez o juventud, con bonitas estampas familiares, o le recordará su primer y lamentable polvo apretado en el asiento trasero de una de esas cajas de cerillas, y por ello tiene ese valor subjetivo. Pero no crea que está en posesión de algo de verdadero valor.
Y encima, tienen el valor de mirarte mal y tacharte de ignorante e inculto. Y eso lo afirma quien no es que no haya leído nada acerca de Kierkegaard, sino que ni siquiera sabe quién sea tal señor.
Les voy a poner algunos verdaderos ejemplos de autos clásicos, coches ante los que hay que descubrirse impepinablemente, que no te pueden dejar indiferente, y que SÍ tienen valor intrínseco, y mucho:
Y el glorioso y magnífico* SLR 300 "Gullwing" de 1955
martes, 2 de febrero de 2010
Es la primera palabra, y prácticamente la única, que se me viene a la cabeza cuando alguien me pregunta qué me parece el serie 1 de BMW. Sólo he podido conducir el modelo alimentado por esa cosa que se utiliza para las calderas, turbocomprimido hasta extraer unos 163 cv de un motor de dos litros de cilindrada. Joder, empezaron por 150, después 163, y siguieron escalando por 177 hasta los actuales 203 que ofrece el 123d.
Para dejarlo a mi gusto, habría que sumarle xenón, sensores de aparcamiento, paquete M -por el volante y los asiento, principalmente-, y otra pintura, lo que supondría añadirle unos cinco o seis mil euros más, como mínimo. Todo eso para tener un petrolero de la gama más baja de BMW... Desde luego, que no cuenten conmigo, pues aunque soy un gran fan de los coches de propulsión trasera, me iría antes a por un Golf GTI o incluso, sin salir de la misma casa, a un Mini Cooper S, que es infinitamente más bonito e ideal de la muerte.
Pero me estoy yendo por las ramas hablando del principal defecto de este 120d, que por si no ha quedado claro es muy caro. Exteriormente, su estética es, cuando menos, discutible. Es un coche que a fuerza de verlo uno se acaba acostumbrando, tanto que no llama en absoluto la atención ni siquiera aunque le montemos unas llantas espectaculares BBS o le acoplemos el kit estético M en un color de la gama "individual" -atención, preparen la chequera-. Es un trozo de metal sin alma, sin fuerza, sin vigor; su diseño no transmite absolutamente nada que no sea la mayor de las indiferencias, incluso un poco de asco. Uno ha llegado hasta el hastío de ver chavalitas solteras mileuristas a bordo de estos aparatos, o bien, canis veinteañeros venidos a más que se gastan el 80% de su escueto sueldo de albañil en lucir palmito a bordo de uno de estos feos coleópteros con ruedas. Porque, sí, el Serie Uno me recuerda más a un escarabajo que el propio escarabajo -antiguo o nuevo, qué más da-. Su frontal pierde la garra deportiva de todo BMW, sobre todo la del bonito E92, por hacer un giro hacia abajo en su imagen lateral de los faros. El coche pretende estar mosqueado, pretende que le dejes paso en la autopista, pero sólo consigue que te apiades de él en vez de temerle.