sábado, 31 de diciembre de 2016

Giros

Uno se levanta un 31 de diciembre sin mucho que hacer, salvo seguir disfrutando de este final de año que está siendo como pocos, por la cantidad de sensaciones y buenos momentos. 
¿Qué mejor ocasión para dar un paseo en mi chiquitín? 
Con la ruta trazada en mi cabeza, buscando carreteras solitarias y curvas, parto tempranito.


La idea era tirar hasta Beas y allí desviarme por Candón a Niebla, subir a Valverde y buscar Berrocal. Pero cosas del destino me desvían, pues me encuentro una extrañamente desierta N-435. La ocasión la pintan calva, y decido subir hasta Zalamea y llegar a la Venta del Cruce.



Pronto llego a Valverde por este camino, donde le doy un poco de beber a la macchina, y atravieso esta pequeña ciudad, en la que se nota cierta actividad.



La carretera nacional sigue muy poco transitada, y la temperatura es baja. Ya habíamos perdido la costumbre a días tan fríos. El termómetro del coche oscila, 6º, 5º, a ratos 3º y aparece escarcha en el borden del arcén en las curvas en sombra, esas orientadas al Norte. Hay que tener cuidado en las zonas umbrías.
De pronto, un kilómetro más allá, 7º. Al rato bajamos a 5º de nuevo... La sierra es lo que tiene.



El paisaje es de postal, el verde lo inunda todo, el momento es bello:



Tras disfrutar un montón con esas curvas, cuestas, cambios de asfalto que tan bien conozco de años trazando finamente por esta vía, llego a la venta, donde inexcusablemente tomaré el desayuno.
Aquí, mi auto en el aparcamiento a pie de carretera, junto al sempiterno puesto donde venden miel artesana y queso de cabra del lugar:



No me podía ir sin catar el exquisito producto de la tierra.



El bar, sólo frecuentado por personajes de aldeas aledañas, mayoritariamente hombres de edad, vestidos de verde cacería y boinas. Es la indumentaria de los pueblos, de gentes acostumbradas a las durezas del clima, que se levantan un día como hoy, con frío que te cagas, y se dicen "¡qué coño!, vamos a desayunar por ahí".

A la vuelta me cruzo en la carretera con varios grupos de motos. Yo ya voy de recogida, y ellos están empezando. Yo de ellos habría esperado a después del almuerzo, el firme estará más adecuado para disfrutar en moto. Pero yo soy yo. Ellos son ellos.

ELLOS SON ELLOS.

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