Pocos autores literarios se han cuestionado la realidad tanto como él lo hizo, fruto, sin duda, de sus propias experiencias con las drogas.
A Scanner Darkly, su título en el inglés original, ya fue leído por mí, y comentado en este mismo sitio. Ahora he visto la película, una fiel adaptación cinematográfica (una más entre la multitud de exitosos filmes que se inspiraron en su obra) protagonizada por un elenco de buenos actores, y con una postproducción en un formato inédito que le da la apariencia de ser un cómic.
Keanu Reeves da vida a un agente encubierto que hace su trabajo en una sociedad no sé si llamarla futura o alternativa. Investiga a una serie de sujetos que viven en los suburbios, tratando de averiguar el origen de una droga que se ha extendido como una plaga dominándolo todo, la sustancia D.
Él mismo, para integrarse en esos ambientes, llega a convertirse en un adicto, con consecuencias fatales, pero no todo es lo que parece, y hay otros personajes que también llevan una doble vida...
La película, como el libro, tiene pasajes absolutamente surrealistas, y en otros momentos se vuelve triste, tanto que dan ganas de llorar, sobre todo al final, en el que, por supuesto, nos llevamos nuevas sorpresas con giro sobre giro del argumento.
Les pongo ahora algunos fotogramas:
Con Winona Ryder en un Miata |
Buena pareja: Keanu junto a Harrelson |
Robert Downey Jr. |
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