lunes, 7 de abril de 2014

El vado invadeable

El trío tranquitrail que formamos el sábado por la mañana Enrique, Kazadum y servidor, se aventuraba parsimoniosamente por carriles despejados entre una seudoneblina que no hacía sino dejar las viseras de los cascos incómodamente llenas de gotitas.
De Huelva a Fuente de la Corcha, pasando por Trigueros, y de allí hacia la Casa de los Cristales a donde nunca llegaríamos por culpa de un río un poco más crecido de la cuenta por las lluvias recientes...
Bueno, media vuelta y patrás, no pasa nada. Es tranquitrail.
Ritmo pausado, lentorro, a ratos aburrido (al menos para mí).

Lo mejor, los paisajes del Andévalo, preciosos en esta época del año

Enrique se acerca con su KTM 690

Kaza a punto de pasar con su vacaburra 1200 Adventure

Un par de birras como colofón no pueden faltar!