Igual que les digo una cosa, les digo la otra.
Honda, también conocida por algunos como Mojonda, es para mí el paradigma, la sublimación, el ejemplo viviente de lo anodino. Vale, tienen mucha tecnología (algunas de sus cosas, otras no tanto, aunque nos quieran vender la moto... nunca mejor dicho), pero sus productos son carentes de alma, de vida. Dan una gran sensación de fabricación en serie y a lo bestia, y se ofrecen como meros números. Así de claro lo veo yo.
Pero no se puede discutir que este clip comercial es genial: