Cuando alguien me pregunta cuál creo que sea el mejor deportivo de la historia, no tengo la menos duda en contestar.
El 911 es bello, lo es desde su nacimiento, y además, a pesar de su extraña configuración de motor (o quizá precisamente por eso, quién sabe), es eficaz en lo que hace. De hecho, cada nueva versión es mejor y mejor y mejor...
Llegó a ganar el París-Dakar, patrocinado por Rothmans, y ahora, unos punkis con $$$ y mala leche han hecho este monstruo, que pone en evidencia y saca los colores a auténticos vehículos todoterreno: