Un fin de semana en las carreras

Un año más cumplimos con la cita obligada, por cercanía, disfrute, y oportunidad: prueba portuguesa del Campeonato del Mundo de Superbikes en Portimao, Autodromo do Algarve.

Con unos pases para paddock facilitados por Pirelli, nos encajamos allí Antonio L., los sucesores de mi dinastía y un servidor, en un día caluroso, despejado, con mucho ambiente, y nosotros con muchas ganas de ver, oir y oler esas máquinas de carreras. 

El pase da para aparcar con preferencia en sitio inmejorable, y deambular por el paddock, donde se encuentran los camiones de los equipos, stands de las diferentes marcas, y algunos puestos de comida y bebida. También puedes acceder a una pequeña grada que da a la curva cinco, una horquilla de izquierdas justo a la altura de la torre de control, claramente insuficiente para la cantidad de personas que quieren disfrutarla, y además a pleno sol. Una decepción en ese aspecto, pues yo ya estaba viendo que iba a ser difícil ver las carreras, que es el motivo principal para ir...

Bueno, sea como fuere, había que aprovechar lo que teníamos, y dimos el paseo consiguiente por entre multitudes de ingleses y algunos pilotos recientemente retirados como Tom Sykes y Chaz Davies:

Manu feliz de encontrarse con Chaz, a quien siguió antentamente en su lucha con la Panigales en recientes años.

Otra cosa que se puede ver en el paddock, además de las tremendas azafatas o paragüeras de Ducati, o Monster (las más tremendas), es el parque cerrado tras alguna carrera. Ahí se pueden ver muy de cerca algunas de las máquinas participantes, y nos pasamos un buen rato admirando y repasando multitud de detalles que sólo en estas moto de competición se pueden ver:

Finalmente, para poder ver las carreras decentemente tuvimos que adquirir unas entradas fetén para bancada principal, en la recta de meta, desde donde se ve gran parte del circuito, hay una pantalla grande para seguir las partes que no se pueden ver, y además está en la sombra. Uno se puede poner muy cerca de la parrilla de salida: 

El segundo día hicimos el "pit walk", nos dejaron durante un rato pasear por el pit lane, muy cerca de los boxes abiertos de los equipos (excepto el de Honda, el único que estaba chapado...), y pudimos ver a algunos pilotos de cerca, amén de hacer acopio de pósters y pegatinas.

Junto a la marca de Bautista frente a su box.

Nos hicieron esta foto cuando me encontré a un bravo pilota

En definitiva fuimos el sábado y nos volvimos tras la última carrera. Y volvimos el domingo de nuevo a ver otra buena serie de mangas, esta vez con furgoneta y nuestras motos para participar en un día de tandas el lunes, cortesía, una vez más, de Pirelli, ¡¡y encima gratis!! Bueno, tuvimos que pagar un seguro obligatorio, pero despreciable cantidad teniendo en cuenta el lujo que supone rodar en ese circuito.

Una vez instalados en un box, Antonio L. con su Kawa ZX10R, y yo con mi humilde 749:

 Un día muy bueno sin mayores incidencias salvo una pequeña fuga de aceite en mi moto... la pobre está viejita y tiene muchos km, y la paliza fue seria.